España gana, el PP pierde

Estamos asistiendo a manifestaciones de responsables regionales del PP que ignoran que se les desmoronan los castillos de naipes que han construido en el vacío; así sacan a relucir, volviendo del revés, los asuntos en los que tienen grandes responsabilidades y que los hechos se encargan de desmentir. Nos dan la oportunidad de hacer llegar de nuevo a los ciudadanos decisiones y datos que pueden comprobar. Pero hay otra consecuencia: si el PP dice una cosa y el otra, en el mejor de los casos se pueden interpretar como rifirrafes que, en el peor de los casos, llevan al desánimo hacia la política y al desprestigio de las instituciones y de la democracia, que son las únicas que, desde luego a los PSOEsocialistas, nos permiten llevar nuestras ideas a la sociedad. Lo aplican al Trasvase del Ebro, infraestructuras, becas, Educación para la Ciudadanía y política antiterrorista.

Como el Trasvase del Ebro sigue proporcionándole réditos electorales al PP, aunque no le dé agua a esta región, no les importa que ni estaba ni se le esperaba y que su increíble final aún tardaría varios años en llegar y la región de Murcia tendría las restricciones de años pasados, superadas por las medidas de ahorro, depuración, modernización y desalación adoptadas por el Gobierno de Zapatero. Su recuperación por Rajoy -que no ha hablado de agua en sus últimas visitas- la dicen Valcárcel y Camps y no aquél, que no se atreve ni a desmentir al PP de Castilla la Mancha, que ha dicho que a Murcia ni agua para beber, mientras Zapatero y la ministra Narbona han asegurado la continuidad del Tajo-Segura.

Resulta difícil creer que se ha pretendido convencer a los ciudadanos de que una obra que resolverá los atascos -que también se producían sin ella- del Puerto de la Cadena debería ¿ralentizarse?, ¿pararse? durante algunos meses del total de años de su ejecución. Además, las infraestructuras ferroviarias de la región estarían ahora fuera de los circuitos europeos con un presupuesto anual que dobla las inversiones del Estado, gracias a un gobierno del PSOE, mientras que se habrían incluido en años del PP con la mitad de la financiación actual. Los europeos tampoco se lo creen.

Algo parecido a lo de las becas, que habrían disminuido, aumentando su presupuesto desde 800 millones de euros (2004) hasta 1.225 millones de euros (2007). Al mismo tiempo, los gobiernos del PSOE han aumentado un 7% los umbrales (cantidad mínima para pedirla) que el PP se negó a variar, y subirán este año hasta un 13% adicional. En nuestra región esto supondrá un aumento aún mayor, porque los sueldos de los murcianos han vuelto a bajar con relación al resto de España (ante los estudios y estadísticas que lo demuestran el presidente Valcárcel contrapone un científico «no me lo creo»), lo que hará que haya más familias necesitadas de esta ayuda que antes.

Sobre Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos pretenden instalar la confusión entre valores colectivos y moral individual, siendo los primeros fruto del acuerdo cívico y la segunda de las convicciones personales, que precisamente con aquéllos se pretende enseñar a respetar con una neutralidad que los profesores continuarán manteniendo. Así lo ha entendido el Parlamento, excepto el PP, el Consejo de Europa, el Consejo de Estado, el Consejo Escolar del Estado, el Defensor del Pueblo, organizaciones tan poco sospechosas como la patronal de los centros católicos, FERE, los profesores de Religión de Cataluña, etc. La irresponsabilidad del PP llega a apoyar una objeción de conciencia ilegal e inconstitucional; lo han dicho también expertos en derecho. Puede que esto estuviera en letra pequeña o que ese día no fueran a clase.

La realidad les ha obligado a abandonar la basura del 11-M y el España se rompe, y en política antiterrorista critican lo que no ha hecho el PSOE y sí hizo el PP: decenas de redenciones extraordinarias (que son potestad del gobierno) a presos de ETA mientras cumplían condena por delitos de sangre; centenares de acercamientos y excarcelaciones en la etapa 1997-2002, todo ello con Mayor Oreja y Rajoy en Interior. Nadie, y menos el PSOE, les ha echado en cara estas acciones ni las declaraciones de aquellos años que cualquiera puede recuperar de la hemeroteca. Ni la responsabilidad que sí tenemos como partido político nos hará usar como arma electoral la única que no debe utlizarse.

Porque la política del PSOE del agua con la región de Murcia está resolviendo y resolverá esta carencia, porque el gobierno socialista invierte en infraestructuras el doble que el del PP, porque hay más becas con el PSOE, porque Educación para la Ciudadanía es democrática y por la responsabilidad del PSOE en política antiterrorista, España gana y el PP pierde.

Raimundo Benzal Román es diputado por Murcia y portavoz de Educación del PSOE en el Congreso de los Diputados.