Hacerlo mal, hacerlo bien

Una de esas personas de las que siempre aprendo algo, me dijo hace tiempo que cuesta casi lo mismo hacer las cosas bien, que hacerlas mal.

En apenas quince días he leído en prensa que una empresa de supermercados dará una prima a su plantilla, a pesar incluso de la crisis. ¿Será por buena gestión?. Ocho días después, otra empresa de alimentación se desmarca con un bonus a sus directivos justo antes de una fusión derivada de las dificultades económicas que pasa.

Dos ejemplos claros de la cara y la cruz de la clase empresarial en la que, como en todo, hay que separar la paja del trigo, los malos gestores de los que lo hacen bien y en definitiva, entender que cuando llega la crisis se pone de manifiesto quiénes han gestionado bien la época de bonanza y quiénes se han dedicado a hacer tonterías en el menos malo de los casos.

Ignacio Caballero Botica