La Confederación Sindical Internacional (CSI) ha convocado el 7 de octubre a los trabajadores de todo el mundo para que manifiesten a los cuatro vientos un único y nítido mensaje que parte del reconocimiento de que los efectos de décadas de desregulación, unido a la codicia y los excesos de los malos empresarios, han conducido al mundo al borde de una recesión global.
Ante esta situación «los trabajadores y trabajadoras en el mundo entero exigen oportunidades de trabajo decente para todos. Un trabajo donde se respeten plenamente nuestros derechos humanos. Un trabajo seguro y saludable. Un trabajo que proporcione un salario aceptable y protección para nosotros y nuestras familias. Un trabajo en el que los problemas y conflictos se resuelvan mediante diálogo y consenso, nunca con imposiciones y represión».
La historia del Partido Socialista Obrero Español está indisolublemente ligada a la lucha de los trabajadores para conseguir los objetivos que hoy, a nivel planetario, configuran lo que ha venido a llamarse «un trabajo decente».
Los gobiernos presididos por José Luis Rodríguez Zapatero son un claro ejemplo de cómo las políticas públicas y legislativas del Partido Socialista Obrero Español se alinean con las justas exigencias de los trabajadores. Las medidas de estabilidad laboral contenidas en la Ley de Mejora de Crecimiento y del Empleo, fruto de un amplio consenso entre trabajadores y empresarios y la promulgación de la Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres, son decisiones legislativas que enmarcan perfectamente en el concepto de «decencia» que defendemos los socialistas.
También la subida del Salario Mínimo Interprofesional producida en la pasada legislatura y los compromisos electorales asumidos al respecto ponen de manifiesto cual es la escala de valores de los socialistas. O la histórica regulación del trabajador autónomo.
Pero no sólo en la elaboración de normas que amplían los derechos de los trabajadores se está actuando a favor de «un trabajo decente». Como señala la declaración de la CSI, «unos servicios públicos de calidad forman parte integral del programa global del movimiento sindical». Y es ahí donde el compromiso del Partido Socialista Obrero Español ha promovido en sus etapas de gobierno la existencia de los pilares básicos de un estado de bienestar moderno: educación, salud y autonomía personal para todos.
También en estos momentos de destrucción de puestos de trabajo, en el que los «cantos de sirena» del fundamentalismo liberal-conservador causante de la crisis quieren predicarnos más desregulación y menos derechos, los socialistas queremos reafirmar nuestro compromiso con la defensa de las conquistas adquiridas que, en ningún caso, son incompatibles con las políticas activas para la mejora de la empleabilidad.
En esta Jornada Mundial el PSOE quiere reafirmar la oposición del Gobierno de España a la Directiva Europa sobre Tiempo de Trabajo, que pretende ampliar la jornada laboral en la Unión Europea de 48 a 65 horas semanales y que, sin ningún complejo, calificamos como una regresión en los derechos de los trabajadores más propia del siglo XIX que del XXI. Desde la Región de Murcia, el propio PSRM-PSOE presentó una iniciativa parlamentaria al respecto el pasado 18 de junio en la Asamblea Regional.
La defensa de los logros sociales y de los servicios públicos de calidad ha sido en el pasado, es en el presente y será en el futuro una guía de las políticas del PSRM-PSOE. También aquí y ahora. En este momento, cuando el agotamiento de un erróneo modelo económico regional es una realidad evidente, los socialistas murcianos estaremos codo con codo con las fuerzas sindicales, sociales y políticas para trabajar contra los efectos de la crisis sin menoscabo alguno de los derechos conseguidos por la acción de los sindicatos y por la mayoría social de la nación española representada en el Congreso de los Diputados.
Antonio Villaescusa Soriano es secretario regional de Empleo y Economía del PSRM-PSOE.
Ante esta situación «los trabajadores y trabajadoras en el mundo entero exigen oportunidades de trabajo decente para todos. Un trabajo donde se respeten plenamente nuestros derechos humanos. Un trabajo seguro y saludable. Un trabajo que proporcione un salario aceptable y protección para nosotros y nuestras familias. Un trabajo en el que los problemas y conflictos se resuelvan mediante diálogo y consenso, nunca con imposiciones y represión».
La historia del Partido Socialista Obrero Español está indisolublemente ligada a la lucha de los trabajadores para conseguir los objetivos que hoy, a nivel planetario, configuran lo que ha venido a llamarse «un trabajo decente».
Los gobiernos presididos por José Luis Rodríguez Zapatero son un claro ejemplo de cómo las políticas públicas y legislativas del Partido Socialista Obrero Español se alinean con las justas exigencias de los trabajadores. Las medidas de estabilidad laboral contenidas en la Ley de Mejora de Crecimiento y del Empleo, fruto de un amplio consenso entre trabajadores y empresarios y la promulgación de la Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres, son decisiones legislativas que enmarcan perfectamente en el concepto de «decencia» que defendemos los socialistas.
También la subida del Salario Mínimo Interprofesional producida en la pasada legislatura y los compromisos electorales asumidos al respecto ponen de manifiesto cual es la escala de valores de los socialistas. O la histórica regulación del trabajador autónomo.
Pero no sólo en la elaboración de normas que amplían los derechos de los trabajadores se está actuando a favor de «un trabajo decente». Como señala la declaración de la CSI, «unos servicios públicos de calidad forman parte integral del programa global del movimiento sindical». Y es ahí donde el compromiso del Partido Socialista Obrero Español ha promovido en sus etapas de gobierno la existencia de los pilares básicos de un estado de bienestar moderno: educación, salud y autonomía personal para todos.
También en estos momentos de destrucción de puestos de trabajo, en el que los «cantos de sirena» del fundamentalismo liberal-conservador causante de la crisis quieren predicarnos más desregulación y menos derechos, los socialistas queremos reafirmar nuestro compromiso con la defensa de las conquistas adquiridas que, en ningún caso, son incompatibles con las políticas activas para la mejora de la empleabilidad.
En esta Jornada Mundial el PSOE quiere reafirmar la oposición del Gobierno de España a la Directiva Europa sobre Tiempo de Trabajo, que pretende ampliar la jornada laboral en la Unión Europea de 48 a 65 horas semanales y que, sin ningún complejo, calificamos como una regresión en los derechos de los trabajadores más propia del siglo XIX que del XXI. Desde la Región de Murcia, el propio PSRM-PSOE presentó una iniciativa parlamentaria al respecto el pasado 18 de junio en la Asamblea Regional.
La defensa de los logros sociales y de los servicios públicos de calidad ha sido en el pasado, es en el presente y será en el futuro una guía de las políticas del PSRM-PSOE. También aquí y ahora. En este momento, cuando el agotamiento de un erróneo modelo económico regional es una realidad evidente, los socialistas murcianos estaremos codo con codo con las fuerzas sindicales, sociales y políticas para trabajar contra los efectos de la crisis sin menoscabo alguno de los derechos conseguidos por la acción de los sindicatos y por la mayoría social de la nación española representada en el Congreso de los Diputados.
Antonio Villaescusa Soriano es secretario regional de Empleo y Economía del PSRM-PSOE.
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