16 de agosto de 2007

Juguetes peligrosos

Millones de juguetes se han fabricado, almacenado, vendido y usado por niños en decenas de países, incluyendo España, sin que cumplieran los mínimos controles de seguridad. El uso de pintura con componentes potencialmente tóxicos y el ensamblaje defectuoso de imanes suponen riesgos evidentes para los niños, según ha reconocido el fabricante. No se trata, en esta ocasión, de un taller clandestino que hace falsificaciones para su venta en mercadillos, sino la compañía estadounidense Mattel, principal fabricante mundial de juguetes, gran parte de los cuales se producen en China. Este escándalo se une así a los numerosos que en los últimos meses han revelado la otra cara de la deslocalización y del fuerte crecimiento de la economía china. Los bajos costes laborales y de producción tienen un precio en seguridad.

Que haya sido la propia compañía fabricante la que ha lanzado la alerta indica cierta responsabilidad por su parte, pero al mismo tiempo subraya la ineficacia de los mecanismos administrativos de supervisión. Confiar en que sea el propio fabricante quien se denuncie a sí mismo es arriesgado por definición. Y no es lógico que sea el infractor quien establezca los mecanismos de compensación: en este caso, el canje de cada juguete retirado por otro de similar valor. Como indicaron ayer portavoces de las asociaciones españolas de consumidores, lo lógico sería dar al comprador la posibilidad de exigir el reembolso de su compra cuando devuelve el artículo. En todo caso, no va a ser fácil organizar la retirada del medio millón de juguetes afectados por la medida que se calcula hay en España. Convendría que las autoridades de Consumo coordinaran dicha retirada y las devoluciones.

Las asociaciones de consumidores también han llamado la atención sobre la falta de credibilidad del distintivo de calidad (CE) de la Unión Europea adherido a muchos de estos productos, sin que existan mecanismos eficaces de verificación, ya que son los propios fabricantes quienes los colocan en sus artículos. Tras las recientes falsificaciones de pasta de dientes o alimentos para mascotas, este nuevo escándalo pone de manifiesto la necesidad de controles más estrictos, al menos en productos para niños o con potencial incidencia en la salud. Ya en noviembre de 2006 se anunció la retirada de cuatro millones de muñecos, también fabricados por Mattel, por el riesgo de desprendimiento de sus imanes, sin que se extendiera la medida a los ahora señalados, algunos de los cuales llevaban cinco años en el mercado.
elpais.com

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...