El aún rey, el ciudadano Juan Carlos de Borbón, no debe abdicar en su hijo, puesto que esta posibilidad ni siquiera está prevista en la Constitución del 78 que, por cierto, nunca juró, manteniendo el juramento de fidelidad a Franco para no incurrir en perjurio.
La figura del Borbón rey, ha venido siendo justificada desde los primeros años de nuestra democracia, pero hoy, más que nunca, cuando conocemos su recorrido y a la vista del lamentable espectáculo que se está dando desde Casa Real, los asfixiados ciudadanos, comienzan a plantearse si su dinero debería utilizarse para mantener a esta obsoleta institución.
Los Borbones, sin excepción, deberían renunciar in saecula saeculorum de sus privilegios y prebendas tanto en sus descendientes directos y colaterales, él jubilarse, ya tiene edad y los demás trabajar o engrosar la lista de parados o encarcelados. Nunca nadie hizo tanto por el advenimiento de la República como él y su parentela.
Llegó el momento de que todos podamos elegir a nuestro Jefe del Estado. Por cierto: ¡Viva la República!
@CarlosRibanez (en Twitter)
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