Por un lado tenemos a un personaje: Francisco Javier León de la Riva famoso no por su gestión al frente del Ayuntamiento de Valladolid si no que lo es por sus asquerosas, misóginas y machistas declaraciones en relación a los labios de una Sra., declaraciones que tod@s conocemos y por razones obvias no voy a repetir aquí.
Este individuo, más que arrepentirse de su indecencia parece sentirse orgulloso de ella e incluso se congratula de que su injuria sexista, en palabras de él mismo “va a tener un efecto bumerán” y que eso le dará más votos.
Repugnante es lo que dijo, pero aún lo es más que piense en réditos electorales gracias a la bajeza de lo manifestado en vez de intentar vender su gestión al frente del consistorio vallisoletano ¿No le dará vergüenza? Evidentemente no porque para tener vergüenza hay que conocerla.
Debemos y podemos recapacitar sobre ambas cuestiones y preguntarnos todos y todas porque cosas como las expuestas, en mi pensamiento en alto, ocurren. Tristemente.
7 comentarios:
El primer comentario, no quiero ni comentarlo, pues este señor me da asco, sencillamente. He vivido 8 años en Valladolid y nunca pensé que pudiesen elegir a este elemento.
En cuanto a Gabilondo, creo que todos lo echaremos de menos, creo que el periodismo está cayendo a la altura del betun, salvo honrosas excepciones.
Saludos.
Es políticamente correctísimo hablar, Carlos, en los términos que lo haces: lo de Belén Esteban, el que Gabilondo guste a propios y extraños, en fin, todo eso que parece que aquí todo el mundo es bueno, pero, Carlos, Gabilondo va a la calle, y se queda en ella, por dignidad. No sé si escuchaste la entrevista que le hizo Monzón (Wyoming), Iñaki no aclaró nada sobre su futuro, pero dejó claro que el periodismo está en manos de mafiosos sin escrúpulos. A iñaki, como a tantas otras personas, y tendencias, los está aniquilando la derecha sociológica. Feliz año.
De la Riva tiene razón en lo básico: la izquierda maniquea y meapilas lo escogió como pim-pam-pum por unas declaraciones que, sin ser ejemplares, no eran nada del otro jueves (recuérdese el "masturbito" de Wyoming y a Pajín diciendo que "no pasaba nada porque era amigo", en fin). La gente no es tonta y ya no traga esas ruedas de molino, así que, seguramente, acierta al decir que esa polémica artificial le hará ganar votos. Lo veremos pronto.
Y a Gabilondo no se lo ha cargado "la derecha sociológica", como dicen por ahí. Se lo ha cargado su jefe, Cebrián, y su empresa, PRISA, por pura estrategia mercantilista. Si hubiera sido más rentable -es decir, si hubiera tenido más parroquia a la que adoctrinar-, tanto él como Calleja y el resto de la plantilla de CNN+ seguirían con sus homilías.
Ahora la cadena pondrá a Gran Hermano en lugar del gran hermano del ministro. Tampoco será tanto el cambio.
Claro, claro... Porque lo que queda fino, progresista e igualitario es que Pajín diga que ella nombra "a quien le salga de los cojones", ¿verdad?
No sufras por Gabilondo. Tiene un gran futuro como experto en ropa interior masculina.
Carlos, en los tiempos del facebok, donde el anonimato va camino del cadalso, debes ser uno de los últimos románticos que dan cancha a criaturas inexistentes. Saludos.
A Mi también me da asco Francisco Javier León de la Riva famoso por sus asquerosas, misóginas y machistas declaraciones en relación a los labios de la ministra Pajín. Y lo cortés no quita para lo valiente. No vale decir que si otro también ha dicho de ella, o que ella misma habla de esta manera o de la otra. Lo correcto es lo correcto y este hombre, por el cargo que tiene y a quién representa cada vez que habla en público, se ha comportado como un cerdo y si fueran creíbles sus disculpas, que para mi no lo son, sería otra cosa (menos guarra).
Con respecto al tema del polifacético y profesional Sr. Gabilondo diré que el mercado es una mierda y que este hombre no se merecía terminar así, en esta cadena. Porque terminar no creo que haya terminado y que volverá a su trabajo en breve, salvo que el periodista quiera tomarse sus merecidas vacaciones.
Lo mas lamentable es que su lugar y el lugar de tantos profesionales de esa cadena (están todavía, creo) sea ocupado por la desfachatez. Esto si que es una alarma social a la que el gobierno debería poner limites, por ejemplo con UN CANON CONTRA LA ANALFABETIZACIÓN y contra los intereses culturales del estado.
Cuando estaba en los informativos de Cuatro, Gabilondo se levantaba dos milloncejos de euros al año. Es de suponer que en CNN+ cobraría lo mismo o más... ¡y aún tenía la cara el tío de decir que los controladores cobraban un disparate! ¿Penita por este pájaro? Va a ser que no.
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