Algo huele a podrido en....

"Ser o no ser, esa es la cuestión: Si es más noble para el alma soportar las flechas y pedradas de la áspera Fortuna o armarse contra un mar de adversidades y darles fin en el encuentro. Morir: dormir, nada más. Y si durmiendo terminaran las angustias y los mil ataques naturales herencia de la carne, sería una conclusión seriamente deseable. Morir, dormir: dormir, tal vez soñar. Sí, ese es el estorbo; pues qué podríamos soñar en nuestro sueño eterno ya libres del agobio terrenal, es una consideración que frena el juicio y da tan larga vida a la desgracia. Pues, ¿quién soportaría los azotes e injurias de este mundo, el desmán del tirano, la afrenta del soberbio, las penas del amor menospreciado, la tardanza de la ley, la arrogancia del cargo, los insultos que sufre la paciencia, pudiendo cerrar cuentas uno mismo con un simple puñal? ¿Quién lleva esas cargas, gimiendo y sudando bajo el peso de esta vida, si no es porque el temor al más allá, la tierra inexplorada de cuyas fronteras ningún viajero vuelve, detiene los sentidos y nos hace soportar los males que tenemos antes que huir hacia otros que ignoramos? La conciencia nos vuelve unos cobardes, el color natural de nuestro ánimo se mustia con el pálido matiz del pensamiento, y empresas de gran peso y entidad por tal motivo se desvían de su curso y ya no son acción. ? Pero, alto: la bella Ofelia. Hermosa, en tus plegarias recuerda mis pecados."




Este bello pasaje de Hamlet viene perfecto para la situación esperpéntica que se está viviendo desde ya hace demasiado tiempo en la Comunidad Valenciana. Podía haber comenzar este escrito con la famosa cita de Shakespeare en su tragedia Hamlet: "Algo huele a podrido en Dinamarca”. Todo el mundo seguirá entendiendo la cita (incluso quizás la entiendan mejor) si sustituimos el nombre de la nación escandinava por el del PP de la Comunidad Valenciana.



Una vez más, las noticias aparecidas estos días en la prensa dan razones a los escépticos ciudadanos para denostar a su clase política.



Camps, (Presidente de la Generalitat Valenciana) Fabra (Presidente de la Diputación Provincial de Castellón), Ripoll (Presidente de la Diputación Provincial de Alicante), etc… Una autentica vergüenza (aunque es evidente que para sentir verguenza hay que conocerla y me parece a mi que ni se le quiere ni se le espera).



Mientras tanto la dirección nacional del PP mira hacía otro lado y “culpa” al Ministerio del Interior. Porque siguiendo con títulos de grandes obras, recuerdo una gran película: “Uno de los nuestros” y ahí radica el problema. Es uno de “los suyos” y a esos “ni tocarlos” aunque la evidencias sean cada vez más y más claras.