El Confidencial de Murcia.
Desde la Ejecutiva federal socialista en la madrileña calle Ferraz se analizan ya con lupa los resultados electorales de este domingo. Y en el caso de la Comunidad de Murcia con especial atención toda vez que los porcentajes remiten al PSOE a lo obtenido en 1995 cuando los populares comenzaron su conquista del poder precisamente en una cita municipal y autonómica. Podría decirse que el PSRM ha tocado suelo y que, quizá, más bajo, imposible.
El órgano ejecutivo de los socialistas a nivel nacional se plantea reordenar los casos de aquellas autonomías donde los resultados pueden calificarse, sin ambages, como sencillamente desastrosos. La de Murcia es, sin duda, una de ellas. A la pérdida de un escaño en la Asamblea habría que unir el fracaso estrepitoso en Murcia y Cartagena con dos apuestas personales del líder regional del partido. A ello se une que dos de los bastiones socialistas desde la restauración democrática, como eran Lorca o Ceutí, hayan caído en manos del PP. En la primera de estas localidades la jugada de apear a Miguel Navarro de la alcaldía a favor de Leoncio Collado ha resultado sencillamente catastrófica para los intereses electorales del PSOE. El candidato del PP, Francisco Jódar, quien se presentaba por tercera vez en contienda electoral y que a partir del día 16 de junio será alcalde, ha sido el gran beneficiado de esa guerra intestina desatada entre los propios socialistas. El ex alcalde lorquino, Miguel Navarro, aún no ha hablado públicamente al respecto si bien en privado ya ha hecho lecturas más que elocuentes de todo lo sucedido.
En Ceutí, donde por vez primera el PP ha superado en votos al PSOE liderado desde 1979 por Manuel Hurtado, la llave la tendrá el edil de IU que, por lo adelantado, no pactará con nadie, por lo que tendría que gobernar la lista más votada.
Por lo que a las apuestas personales de Pedro Saura se refiere, tanto María José Alarcón, en Murcia, como Ignacio Segado, en Cartagena, han salido ampliamente derrotados frente a dos pesos pesados del PP. La primera, ha venido a indicar, entre otras cosas, que la estrepitosa derrota del domingo puede deberse a que “los murcianos pueden estar acostumbrándose a convivir con la corrupción”.
Sobre el segundo, el candidato cartagenero, incluso se ha llegado a especular con que abandone definitivamente el barco.
En cualquier caso, desde Ferraz se dan plazos. Se trataría de aguantar el tirón hasta las elecciones generales, previstas en principio para marzo de 2008, luego el congreso federal en julio, posteriormente los regionales y, a partir de ahí, intentar reconducir la situación allá donde el batacazo, tras el del pasado domingo, pueda resultar aún más morrocotudo.
Desde la Ejecutiva federal socialista en la madrileña calle Ferraz se analizan ya con lupa los resultados electorales de este domingo. Y en el caso de la Comunidad de Murcia con especial atención toda vez que los porcentajes remiten al PSOE a lo obtenido en 1995 cuando los populares comenzaron su conquista del poder precisamente en una cita municipal y autonómica. Podría decirse que el PSRM ha tocado suelo y que, quizá, más bajo, imposible.
El órgano ejecutivo de los socialistas a nivel nacional se plantea reordenar los casos de aquellas autonomías donde los resultados pueden calificarse, sin ambages, como sencillamente desastrosos. La de Murcia es, sin duda, una de ellas. A la pérdida de un escaño en la Asamblea habría que unir el fracaso estrepitoso en Murcia y Cartagena con dos apuestas personales del líder regional del partido. A ello se une que dos de los bastiones socialistas desde la restauración democrática, como eran Lorca o Ceutí, hayan caído en manos del PP. En la primera de estas localidades la jugada de apear a Miguel Navarro de la alcaldía a favor de Leoncio Collado ha resultado sencillamente catastrófica para los intereses electorales del PSOE. El candidato del PP, Francisco Jódar, quien se presentaba por tercera vez en contienda electoral y que a partir del día 16 de junio será alcalde, ha sido el gran beneficiado de esa guerra intestina desatada entre los propios socialistas. El ex alcalde lorquino, Miguel Navarro, aún no ha hablado públicamente al respecto si bien en privado ya ha hecho lecturas más que elocuentes de todo lo sucedido.
En Ceutí, donde por vez primera el PP ha superado en votos al PSOE liderado desde 1979 por Manuel Hurtado, la llave la tendrá el edil de IU que, por lo adelantado, no pactará con nadie, por lo que tendría que gobernar la lista más votada.
Por lo que a las apuestas personales de Pedro Saura se refiere, tanto María José Alarcón, en Murcia, como Ignacio Segado, en Cartagena, han salido ampliamente derrotados frente a dos pesos pesados del PP. La primera, ha venido a indicar, entre otras cosas, que la estrepitosa derrota del domingo puede deberse a que “los murcianos pueden estar acostumbrándose a convivir con la corrupción”.
Sobre el segundo, el candidato cartagenero, incluso se ha llegado a especular con que abandone definitivamente el barco.
En cualquier caso, desde Ferraz se dan plazos. Se trataría de aguantar el tirón hasta las elecciones generales, previstas en principio para marzo de 2008, luego el congreso federal en julio, posteriormente los regionales y, a partir de ahí, intentar reconducir la situación allá donde el batacazo, tras el del pasado domingo, pueda resultar aún más morrocotudo.
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