Augurio: Presagio, anuncio o señal favorables o adversos de algo futuro.
No
creo, personalmente, en la posibilidad que se atribuyen algunos
visionarios de leer el futuro. Si así fuera cuantos males se podrían
evitar o solucionar.
Hay casos en que esa “visión” es
percibida tan de lejos que sorprende que la misma, cuando ya es
realidad, sea recibida con inusitadas muestras de extrañeza, confusión,
pasmo o estupefacción.
Personalmente no deja de “pasmarme” que gran parte de la sociedad se “sorprenda” ante las mentiras flagrantes con las que el ya presidente, Mariano Rajoy, nos regaló durante la campaña electoral ¿Alguien de verdad creyó a Rajoy? Solo aquellos que se querían dejar engañar. ¿Alguien se extraña de que el “desaparecido” Presidente del Gobierno culpe de sus lacerantes medidas a la gestión del anterior Ejecutivo? Solo aquellos que se querían y se quieren dejar engañar.
Yo mismo, que de visionario nada tengo, manifesté el pasado 16 de septiembre en este mismo blog en un post titulado: “Malos tiempos nos vienen”:
“Su Gobierno será un autentico “mirar atrás” con en el espejo retrovisor permanentemente puesto, en un continuo “echar la culpa” al Gobierno anterior, un continuo lamento de “bastante hacemos con lo que nos hemos encontrado” y excusas por el estilo. No asumirán responsabilidad alguna y sestearan a la espera de tiempos económicos mejores. En un juego con la ilusión de los millones de parados con afirmaciones gratuitas como las expresadas por González Pons y posteriormente corroboradas por Cospedal: “crearemos 3.5 millones de puestos de trabajo” con el “cuento de la vieja” de crear un millón de empresarios y que estos a la vez emplearán una media de tres personas… sin explicar como se hace “eso”. ¿Por qué? Porque no lo saben”.
Anteriormente y en otro post del 13 de agosto titulado “Que nadie se engañe” indiqué entre otras cosas:
“Que
nadie se engañe, que nadie el día 21 de noviembre se eche las manos a
la cabeza y se sienta asombrado: Rajoy declarará al Estado español en
situación de “quiebra técnica”, por culpa de "esos malditos rojos" y
planteará un “ERE” que afectará únicamente, que no es poco, a las clases
medias y bajas. ¿Y las altas?: A los amigos no se les jode. Faltaría
más.”
También el día 17 de noviembre en el post ¿Nos tenemos que resignar?:
“El Partido Popular intencionadamente ha realizado un programa electoral ambiguo y sin concreciones. Su campaña electoral no ha servido para despejar las muchísimas dudas que alberga el mismo. Sí sabe pero no dice, qué es lo que va a hacer, porque es consciente de que si lo manifiesta perderá una parte importante de ese torrente de votos que le van a caer el domingo y que les va a permitir gobernar con mayoría absoluta”.
Visto lo anterior, en algún caso con meses de antelación ¿De verdad las excusas que esgrime el Partido Popular se las cree alguien? ¿De verdad el déficit es la causa?
Es más que obvio que es una excusa más, si no hubiera sido esa, habría sido cualquier otra.
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